Capital Privado: ¿Qué es Venture Capital y Private Equity?

El Capital Privado se puede dividir en Venture Capital y Private Equity, ambos tienen en común que son aportaciones de capital de terceros a empresas.

Según la Asociación Española de Capital, Crecimiento e Inversión (ASCRI), el Capital Privado se puede dividir en Venture Capital y Private Equity, ambos tienen en común que son aportaciones de capital de terceros a empresas que consideran disruptivas o con mucho potencial de crecimiento pero ¿en qué se diferencian? ¿Qué son exactamente? A continuación nos apoyamos en las definiciones de ASCRI para explicar estos dos grandes conceptos de inversión privada:

¿Qué es Venture Capital?En ASCRI definen al Venture Capital como la aportación de capital en una empresa que se encuentra en fase inicial o de desarrollo muy temprana. Normalmente, la inversión de Venture Capital es destinada a empresas tecnológicas o con un fuerte componente innovador/disruptivo. Este tipo de inversión no requiere grandes cantidades de capital pero su riesgo es mayor ya que no se tienen resultados históricos de la empresa a la que se destina la inversión ni se sabe con certeza cuál será la aceptación del producto o servicio por parte del mercado.A su vez, la inversión de Venture Capital se puede dividir en tres subtipos:

  1. Capital Semilla o Seed Capital: Entendida como la inversión muy temprana en ideas de negocio o empresas de recién creación con un servicio o producto aún por lanzar al mercado.
  2. Capital de Arranque o Start up Capital: inversión para el establecimiento de la compañía (regsitro de la misma, web, oficina) y arranque de su actividad. El capital aportado es mayor que en las inversiones de capital semilla ya que se entiende que sus necesidades de caja son mayores.
  3. Other early stage: Cuando la startup ya está en una fase más avanzada puede optar a recibir rondas de financiación de mayor tamaño.

¿Qué es Private Equity?

Por otro lado, la Asociación Española de Capital, Crecimiento e Inversión, considera Private Equity a la inversión dirigida a empresas en etapas de crecimiento o ya consolidadas. En este sentido, el Private Equity se divide en cuatro tipos:

  1. Capital de expansión o desarrollo, también llamado Growth Capital: se refiera a la financiación el crecimiento de una empresa que cuenta ya con beneficios. El destino de los fondos puede utilizarse para adquirir activos fijos, incremento del fondo de maniobra para el desarrollo de nuevos productos o acceso a nuevos mercados (planes de expansión). Son inversiones de mayor volumen que las de Venture Capital y de menor incertidumbre ya que se cuenta con datos históricos sobre la compañía y sus ventas.
  2. Capital de Sustitución o replacement: entendido como el relevo de parte del accionariado actual por la entidad de capital riesgo. Situación muy frecuente en las empresas familiares o que están en sucesión. También se puede producir en algunas oportunidades de ventas de activos o ramas de actividad no estratégicas de empresas muy grandes, donde sus gestores u otros externos busquen un mayor apoyo financiero en el capital riesgo.
  3. Operaciones apalancadas o LBO: la compra de empresas en las que una parte sustancial del precio de la operación es financiada con recursos externos, garantizados por los propios activos de la empresa adquirida y por el capital aportado por los inversores de la operación. En estas operaciones lo más habitual es que la empresa objetivo cuente con unos flujos de caja consistentes, estables y lo suficientemente elevados como para poder hacer frente al pagado de los intereses de amortización del principal de la deuda.
  4. Capital de Reestructuración o reorientación, también nombrado Turnaround: cuando se invierte en empresas que están atravesando momentos difíciles durante un período prolongado de tiempo y están necesitadas de recursos financieros para poder implementar grandes transformaciones que les permitan sobrevivir, los fondos que se invierten se consideran capital de reestructuración.

Fuente: ASCRI