Desde la romántica idea de “querer cambiar el mundo” hasta la más realista; “querer trabajar para uno mismo”, existen infinidad de razones y motivaciones que nos llevan a querer emprender. Aunque muchas veces es la combinación de varias de esas razones la fórmula que definitivamente nos lleva a ello, siempre hay una que predomina. A continuación hacemos una selección de las 5 razones principales para querer emprender, ¿te identificas con alguna de ellas?
1. No quiero tener jefe
Trabajar para uno mismo, con independencia, es una de las razones más comunes y comprensibles que nos lleva a quereremprender. Tener mayor flexibilidad en cuanto a horarios y el lugar desde el cuál trabajar es especialmente atractivo para todas aquellas personas con responsabilidades familiares u otras limitaciones. Además, la idea de que todos los beneficios que obtengamos a través de nuestro trabajo sean “íntegros” para nosotros nos llama mucho la atención.No obstante, no hay que olvidar que el tener toda esa libertad e independencia, genera a su vez muchas responsabilidades, ya que al ser emprendedores y dueños de nuestro propio negocio tendremos que afrontar tanto los beneficios como los pagos o las perdidas.
2. Tengo una idea innovadora que cambiará el mundo
Según Manuel de Castillo, profesional con más de 20 años de experiencia en el sector de la dirección de negocios define emprender como el “desarrollo de nuestras ideas según nuestras propias pautas”, cuando tenemos una idea innovadora que creemos que agregará valor a la sociedad y contribuirá a su desarrollo y bienestar, es muy posible que nos lancemos de cabeza a intentar materializar esa idea.Si tienes una pasión muy clara por un producto, servicio o idea, el emprendimiento es la principal vía que te permitirá compartirlo con el mundo y a resolver problemas o mejorar la vida de las personas.
3. Estoy estancado y necesito seguir creciendo tanto en lo profesional como en lo personal
Trabajar de manera rutinaria, sin motivaciones, sin metas… se convierte en todo lo contrario cuando decides emprender. Cuando eres emprendedor te transformas en un apasionado de tu idea y, por ello, no te falta ni motivación ni ganas para trabajar en sacarla adelante. Cada día es un reto y una satisfacción personal, ir superando las dificultades, demostrándose a uno mismo su valía y perseverancia. Emprender es en pocas palabras un desafío personal que te permite probar tus habilidades y superar desafíos cada día.De este modo, experimentamos un constante y veloz crecimiento tantopersonal como profesional.En este punto también entra en juego cuando queremos poner en valor los conocimientos y experiencia que poseemos en un sector determinado, en el cual estamos muy metidos y creemos que podemos aportar más valor. Los emprendedores que desarrollan ideas de negocio basadas en sus propias vivencias y sapiencias, tienen muchas más posibilidades de triunfar, ya que el conocimiento del mercado en el cual se integra tu proyecto, además del público y la competencia, agrega muchos puntos a tu favor.
4. Puedo conseguir formar un equipo perfecto
Como ya hemos comentado en artículos pasados, emprender en solitario no suele ser recomendable. Para arrancar una startup con mayores probabilidades de éxito, según nuestra experiencia, se precisa de un equipo multidisciplinar formado por al menos 2 o 3 personas con diferentes perfiles: técnicos, especialistas de producto o sector y de marketing digital. En este sentido, muchas veces a lo largo de nuestra vida y carrera profesional nos topamos con personas con las que formamos increíbles equipos y junto a las que consideramos que podemos ser capaces de realizar proyectos con mucho potencial. Aquí nace otra de esas razones que nos pueden llevar a querer emprender, si contamos con un buen equipo humano de calidad, tenemos mucho ganado para conseguir sacar adelante un proyecto emprendedor.Además, emprender implica tener la oportunidad de crear empleo y contribuir al desarrollo económico de la sociedad.
5. Quiero aprender de los demás para mejorar
A través de las startups es la mejor forma de acceder rápidamente a muchos conocimientos y experiencias, querer aprender tanto del equipo como de los clientes, puede ser otra razón importante que nos lleve a querer emprender.La típica frase que se escucha mucho en el sector emprendedor de “aprendí más trabajando un mes en una startup que trabajando cinco en una empresa” aunque suene a tópico, se cumple a la perfección. Trabajar en una startup te aporta un conocimiento 360 de mercado y negocio.
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