A principios de este año saltaba la noticia de que Zappos, una de las empresas punteras del comercio online, quiere establecer a final de año una nueva organización en la que no haya jerarquías ni jefes y que supondrá que su actual CEO, Tony Hsieh, deje su cargo para ser un empleado más.Este anuncio ha puesto de moda la Holacracia, que es como se denomina este tipo de organización empresarial sin jerarquía, y han sido muchos los medios que se han hecho eco de la noticia y de este sistema de gestión entre ellos Mashable o Enrique Dans en su columna y blog. Pero vamos a conocer un poco más en que consiste este sistema de gestión y la implicación de aplicarlo en una tu empresa.La holacracia supone ir más allá de tener una empresa sin Director General, implica un cambio de mentalidad profundo en el que es necesario total transparencia y herramientas que permitan una estructura horizontal y la toma de decisiones en grupo.Se atribuye a Brian Robertson la creación de este sistema de gestión sin jerarquías a principios de este siglo XXI, por lo que realmente es un sistema muy novedoso que se ha puesto en práctica en pocas ocasiones y nunca en una empresa tan grande como Zappos, que cuenta con 1.500 empleados.Según se explica en Holacracy.org, la web que trata de dar sentido a toda esta filosofía, la holacracia se mueve por lo que denominan “tensiones” que es lo que se produce al haber una diferencia entre la realidad presente y lo que “podría ser” o propósito. Las tensiones sólo son útiles en la medida en que la organización puede transformarlos en un cambio significativo.Pongamos un ejemplo para entenderlo mejor. Una empresa necesita cambiar su página web para adaptarse al mercado. Esto sería una tensión. Para hacer frente a la tensión, el grupo (también llamado "círculo" o "equipo") se reúne para elegir un miembro que se hará cargo de esa tarea. Esa persona será responsable de la nueva web, si no es capaz de llevar a cabo la tarea, se le asignarán otras, pero si pasado un tiempo no ejecuta correctamente ninguna, el grupo puede decidir su salida.Según Robertson, la ventaja de esta estructura es que "genera claridad organizativa" al estar los trabajadores más preocupados por la tarea a realizar que por quedar bien con el jefe. Otra ventaja es que permite a los empleados explorar áreas de interés o aprovechar otras habilidades, por ejemplo, un programador puede dedicar la mayor parte de su tiempo a programar pero si tiene interés en el diseño, puede ofrecerse para llevar alguna tarea dentro de ese campo.El sistema cuenta con diversos mecanismos para evitar caer en posibles trampas como exceso de reuniones, la tiranía de las mayorías, separar lo táctico de lo estratégico, etc. Según Zappos, actualmente el 10% de su estructura ya se organiza mediante holacracia y espera que para finales de este año toda la compañía funcione bajo este sistema de gestión.Será un paso importante para conocer si la holocracia puede utilizarse para una gran compañía o si su implantación sólo tiene sentido en start-ups o pequeñas compañías. En cualquier caso, es una alternativa a tener en cuenta. Si se está interesado en ella se pude descargar una guía rápida sobre la misma en este enlace o pedir asesoramiento a Holocracy.org.